lunes, 16 de noviembre de 2020

 


CLOTI

Atendiendo  las recomendaciones de su doctor de cabecera para aliviar el reumatismo y animada por un perseverante recuerdo de días mejores…Cloti, mejor conocida como Doña Cloti, popular personaje de una comedia que hizo historia en la televisión nacional, se recluyó en una alejada vereda de un pueblito de tierra caliente.

Quería la cercanía del mar, pero sus ahorros no dieron para tanto.

Al llegar a la vereda,  respiró tranquila después de muchos años. Por fin un lugar dónde no era reconocida; por fin un lugar en el que no le iban a preguntar sobre el origen de su escandalosa y desaparecida fortuna…un lugar en donde a nadie iba a importarle el deterioro de su belleza. Nada

Quería hallar paz y armonía, viejo concepto oriental, antigua consigna sesentera…..“Love and peace”

Era tal su confianza en su decisión que ni por un segundo se le pasó por su cabecita acostumbrada a memorizar libretos que iba a ser todo lo contrario.

Tan pronto como los vecinos, agrestes campesinos advirtieron su presencia sintieron temor e hicieron correr el rumor de que la forastera era ni más ni menos, la hija de Satán; un personaje del mal que había llegado del mismísimo Averno a llenar de desgracias e iniquidad a la, hasta entonces, tranquila comunidad campesina.

Tales habladurías no lograron abatir el temple de Cloti, tan acostumbrada a tratar con programadoras, productores, coordinadores, todos esos, y tratando de construirse una imagen positiva se puso al servicio de los demás.

Organizó un puesto de salud; fundó una cooperativa agrícola; prestaba dinero sin interés; atendía a los enfermos, vacunaba los animales….pero la situación no cambió.

Le aceptaban su entrega generosa, pero en su ausencia todos se referían a ella con insultos, con resentimiento, con odio….

Lo peor…

Una noche su casa fue quemada por un grupo de vecinos quienes fueron alertados sobre ciertos tratos que “la bruja tenía con la guerrilla” y hasta afirmaron que Cloti era la concubina de un despiadado criminal apodado “El Coyote”, famoso por su sevicia y su falta de modales.

¿Verdad?

¿Mentira?

Lo que no pudo el reumatismo lo lograron el chisme y la ignorancia y la teleaudiencia nacional perdió a una de sus figuras señeras.

RIP.

Santa Marta, marzo 2008

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