OFENLIA (o la enmascarada por accidente)
(Cuasisátira fundamental en un tirón, cuatro lágrimas y una
carcajada)
PERSONAJES:
OFENLIA,
viuda joven con varios pretendientes, antigua enamorada de un actor de
televisión
CHARLOTTE, como la Corday, loca de atar por su relación
con el amor.
CONSUELO,
la negada. Su esposo se llama Pedro.
JOSELYN,
en verdad se llama María Eugenia pero el arribismo y su marido la convirtieron
en Joselyn.
PAMELIA,
hija de Ofenlia. Su nombre es el resultado de una broma que sus amigas le
hicieron a Ofelia (Pamela-Ofelia)
LULLY,
amiga de Pamelia. Engendro draculiano pero de gran sensibilidad….
MARIA
ALICIA, criada sindicalista, bien hablada y elegante. Maja, tiesa y petulante
PRESENTACIÓN:
CONSUELO: ¡Muy buenas tardes damas y caballeros!
JOSELYN: .....es un orgullo presentarles
CHARLOTTE:
...a una mujer muy especial
CONSUELO:
¡Feliz¡
JOSELYN: ¡Exitosa!
CHARLOTTE:
¡Arrolladora!
CONSUELO:
¡Patética!
JOSELYN:
¡Hipócrita!
CHARLOTTE:
¡Desastrosa!
CONSUELO: Con ustedes... ¡la incomparable, la
inigualable, la inacabable!
TODAS: ¡Ofelia Baracaldo v. de Chávez!
(Música.
Las tres ocupan sendos lugares al fondo de la escena. Ofelia entra: Bata,
rulos, pantuflas y tres teléfonos para contestar: Fijo (f), inalámbrico (ia),
celular (cel. (Intenta contestar todos a la vez)
OFELIA: (f) ¿No estás escuchando? Te repito...
Viernes a las 5 de la tarde. Sí, las cinco. En la .....carrera 102.....No, la
102... ¡Un momento! (ia) Compré hace unos días un sastrecito oscuro ¿Zapatos?
Si, zapatos marrón...¿Las medias son oscuras? Ah, espérame un momento! (cel) No
hago otra cosa que eso... ¿Sabes? Tengo miedo....... ¡Qué Cheito se entere,
nadie tiene porque enterarse, nadie, ¡Bobito!
Amor, espérame un segundo........f) No 102- 34... cinco de la tarde. Por
favor, ¡no se le olvide! Es un asunto muy importante. El doctor lleva un vestido
claro, camisa blanca y con una corbata azul con….
Si, corbata azul, con
un...! Corbata azul, azul con......un lazo.......
(ia) Me toca comprar medias. ¿Sexy? ¿Quedaré sexy? Bueno. ¿Qué tan larga la falda? ¿Pantalón? ¿Entonces para qué
medias nuevas?...Entiendo..........
(En
ese momento pasa Pamelia y Lully, su mejor amiga)
OFELIA: ¡Eh!.....¿Señoritas, a dónde creen que van?
PAMELIA: ¡Eso a ti no te importa!
OFELIA: Claro que me importa ¿Usted señorita?
LULLY:
Termine su llamada y con gusto le responderé.
OFELIA:
(cel) ¡Oh! !Es la niña! ¿Quieres esperar un poco? ¡Pamelia¡ Si cruzas por esa puerta dejarás de ser mi
hija.
PAMELIA:
¿Por esa?
LULLY:
Si, esa fue la que señaló.
OFELIA:
¡Por esa!
PAMELIA:
¡Está bien! (Sale y desde fuera) ¡Listo! (Abraza a Lully) ¿Lo has oído? Ya no soy hija de esa patética mujer (Las dos
saltan y ríen de alegría)
LULLY: ¿Puedo decirle algo?
OFELIA:
¡Un momento! Ya le dije que el doctor lleva una corbata azul con dibujitos de
los Simpson.
Oiga,.... ¡espere!, falta lo más... (le cuelgan) ¡Cállese! (ia) Yo veré lo que
me pongo. Al fin y al cabo yo voy a ser la perjudicada ¡Grosera usted!
Su abuela también (cel) ¡Amor! ¿Sigues ahí? ¡Amorcito! Está bien,
entiendo, cómo usted quiera Doctor
Roncancio!...!No me puedes decir eso!
¡Espera! ¡Dios mío! (A Lully) !Bien,
señorita...!
LULLY: ¡No le molestará que usemos sus tarjetas de
crédito!
OFELIA: ¿Qué? ¡Devuélveme mis tarjetas! (Corretea a
Lully) ¡Ladrona!
LULLY:
Fue idea de su hija.
OFELIA:
!Mientes!
PAMELIA: ¡No
miente! ¿Reconoces este cofrecito?
OFELIA:
¡Mis ahorros!
PAMELIA: ¡Ahora son mis ahorros! Vamos Lu, Chao, by. ¡Adiós,
hasta la vista!
OFELIA:
¡Regresa...! Tiene que ser una alucinación. ¡Hijita, regresa! (pausa) “Cría cuervos y.. ojos que no ven” No puede
estar pasando esto. Madre ejemplar y dedicada como yo...pocas. No merezco esta
cruz. Es culpa de Cheito... ¡la malcrió!
Oh Dios... problemas, problemas, problemas (Bebe un trago, toma una
pastilla) Hoy más que nunca necesito el apoyo del clan (Otra copa) ¡El clan de
brujas de la secundaria!
(Se
ilumina la parte de atrás de la escena y se ve a tres mujeres detrás de sendas
ollas brujeriles. Son Consuelo, Joselyn y Charlotte en plan de hechiceras.)
CONSUELO:
(varias veces) Aléjate de ellos. Son la perdición. Sólo quieren lastimarte.
JOSELYN:
¡Dales su merecido! ¿Quererlos? Una merece respeto. Exigirles.
CHARLOTTE:
La vida sin ellos, no vale nada
¡Atrévete picarona!
(Los
textos en un momento son apenas audibles. Va aumentando volumen hasta el grito.
Silencio: Ofelia va al teléfono y empieza a marcar...)
PANTOMIMA
DE LAS TELEDEPENDIENTES
(Simultáneamente
con la marcación de Ofelia, de distintas partes de la escena aparece el elenco
completo hablando por teléfono. Música -Jazz- acompaña sus movimientos. El
intento es parecer una danza. Los actores deben explorar todas las actividades
corporales que permita la acción - hablar por teléfono- . En un momento todas
se reúnen al centro y cantan la canción de las fonoadictas.)
CANCIÓN FONOADICTAS
Gracias Alexander Graham Bell
gracias mil y mil por inventar
un artefacto de belleza sinigual
sin el cual no podemos ya vivir.
Gracias, muchas gracias doy también
a Celumovil, Comcel y Telecom
por permitirme a toda hora disponer
de sus líneas, sus antenas y mi
voz......Ring, ring
(Coro) Somos las fonoadictas
todas llenas de ilusión..
somos las fonoadictas
y tenemos corazón.
Somos las fonoadictas
el teléfono es amor
somos las fonoadictas
y te gusta mi canción.
Mi teléfono no para de sonar
con la dulce insistencia del amor
presurosa yo corro a contestar
"Alo" siempre digo con
fervor.
Qué maravilla escuchar allá tu voz
y aquí la mía temblando de emoción
cuando cuelgas hay un vacío de dolor
que se termina cuando vuelve a
timbrar...Ring, ring
Coro. Somos las fonoadictas...etc
Si no me llaman yo me siento
enloquecer
todo parece terminarse para mí
pasan las horas y no puedo resistir
sin el sonido melodioso del ring
ring.
Por eso quiero que no vuelva a
suceder
y yo te pido que no dejes de anotar
el 2 40 38 23
y te ruego no me dejes de llamar,
ring, ring
Coro: Somos las fonoadictas...etc...
¡Ay, ay, ay!
¿Qué será de mí?
¿Qué sería de mí?
¿Qué sería de mí......sin tí?
OFELIA : ¡Urgente, chicas! ¡Las necesito aquí! No
tarden, por favor. Voy a enloquecerme
¡Oh! !Tanta tristeza! ¡Tanta soledad!
!Espera! (Le cuelgan) Quien me manda a ponerme tan dramática. En fin
¡María Alicia! ¡María Alicia!
M.
ALICIA: (Elegante) ¡Estoy a sus órdenes señora!
OFELIA:
Rápido! ¡Arregle la casa! Tengo visita.
M.
ALICIA: La casa esta arreglada. Lo único desarreglado que hay por aquí es
usted.
OFELIA:
¡Como te atreves,...!
M.ALICIA:
Cuando me contrató, usted me pidió que fuera honrada y sincera ¿Ya se le
olvido?
OFELIA:
¡Por supuesto que no! Pero no te pedí que me ofendieras.
M.ALICIA:
No ha sido mi intención ofenderla. Pero, si lo piensa un poco, mira la casa, mira su
entorno, debe reconocer que su presencia afea el ambiente.
OFELIA:
¡No le permito que...!
M.
Alicia: Usted no está en posición de impedirme nada ¿Olvida que me debe los dos
últimos meses? ¿Olvida que yo sé que usted se ve a escondidas con el doctor
Roncancio? ¿Olvida que yo sé que usted le saca las monedas de la alcancía a su
hija para comprar licor?
OFELIA: ¡Está bien!
Tráeme un poco de agua.
M.
ALICIA: ¡Lo siento señora! Es mi hora de
salida y Rigoberto me espera!
OFELIA: Pero si tan solo le he pedido...
M.ALICIA: No debe usted hacerlo ¡Ah! El doctor Cheito
le dejó dicho que no lo espere hasta el viernes. Viajo a Medellín.
OFELIA:
¡Llamo Cheito! ¿Por qué no me hiciste pasar?
M.
ALICIA: ¿Para qué? Para que siga engañando a ese pobre hombre
OFELIA: Eso no es de su incumbencia
M.
ALICIA: Desde luego. Adiós
OFELIA:
!Lo que me faltaba! ¡Que me
extorsionaran en mi propia casa! Que voy a hacer. (Llaman a la puerta) !Debe
ser Consuelo! ( Pausa) Pasa! !Pasa! ¿Qué ocurre, estas pálida?
CONSUELO:
!Ese vecino es un demonio! Se quedó mirándome con sus ojos pecadores y me
pidió... me da vergüenza decirlo...
OFELIA:
¿Qué?
CONSUELO:
Me pidió que le diera...
OFELIA:
¿Qué?
CONSUELO:
!La mano!
OFELIA:
¡Ah! El no te mira con ojos pecadores
CONSUELO:
¿Cómo qué no? Me miraba así (hace caras)
OFELIA: !El vecino tiene una enfermedad en los ojos!
CONSUELO:
¡Ah! Pero no me iras a decir...
OFELIA:
Si té pidió que le dieras la mano es para bajar el escalón de su casa que es un
poco alto.
CONSUELO:
¡Ah! !Bueno, dejemos eso!
OFELIA: Me alegra mucho verte.
CONSUELO:
¡Cuídate de la alegría! Toda alegría esconde una pena y detrás de cada pena... !habita
el pecado!
OFELIA: No exageres.
CONSUELO:
¿Exagerar? Nunca ¡He pensado mucho en ti estos días! Llevas una vida
disparatada, disipada, vergonzosa... Así que me dije “Consuelo, si tú quieres a
tu amiga, si aprecias a esa oveja
descarriada, debes hacer algo por ella ¡Y lo hice! Fui al almacén de las
Terciarias y te compre esto! ( le muestra un afiche del Sagrado Corazón)
OFELIA: ¡Está muy lindo!
CONSUELO:
¿Lindo? ¡Es Jesús!... !Vamos! Hay que
quitar esto (Quita un bodegón que
ilumina la sala) y ponemos a Jesús. ¡Adiós pecado! (Bota el bodegón) !Ves, ya se ve diferente! ¡Hay mucha luz! ¡Austeridad!
Austeridad, querida mía (Apagón, enciende un candelabro) Así está mejor!
Acudí tan pronto me llamaste.
OFELIA:
Consuelito, tengo problemas.
CONSUELO:
!Cuéntame!
OFELIA: Para empezar, no veo nada sin luz y sin mis
gafas.
CONSUELO: Para lo que hay que ver.
OFELIA: ¡El doctor Roncancio, Cheito y yo!
CONSUELO:
¡Pecado! Antes de proseguir, encomendémonos a San Hilario. Repite conmigo
....”San Hilario bendito”
OFELIA:
“San Hilario bendito”
CONSUELO:
“Protege estos castos oídos”
OFELIA: “Protege estos castos oídos”
CONSUELO: “del veneno pecador”
OFELIA: Ah ¡Ya! !No exageres! Necesito ayuda no
regaños, ni exorcismos
CONSUELO:
!Esta bien!
OFELIA: El doctor Roncancio fue mi primer enamorado,
antes de la muerte de mi esposo, antes de Cheito, ¿Sabes?
CONSUELO:
¡Lo sé todo!
OFELIA:
Nunca pude olvidarlo
CONSUELO:
¡Eso está muy mal!
OFELIA: Debo verlo y aclarar todo en mi corazón
CONSUELO:
Pues... ¿cuál es el problema?.
OFELIA: No sé qué ponerme
CONSUELO:
¡Te ayudaré! Déjame ver (Va al ropero y elige tres prendas largas, oscuras y
pesadas)
OFELIA:
!Esto!
CONSUELO:
¡Si, póntelo! O, ¿acaso quieres atraer las miradas pecadoras de los hombres? Si
eso quieres, no sé por qué soy tu amiga y por qué me has llamado
OFELIA:
!Esta bien! !No exageres!
CONSUELO:
¡No exagero! ¡Medida, niña! !Sobriedad! ¡Austeridad! !El fin está cerca! Los
hombres son la encarnación de Lucifer
OFELIA: Me pones nerviosa
CONSUELO:
Tanta sonrisa, tanto músculo, tanta fortaleza no son más que señuelos que nos
pone el maligno para atraparnos.
OFELIA:
¡No más!
CONSUELO
: ¡Me has gritado!
OFELIA: No he gritado
CONSUELO:
¡Me has gritado! !No soporto que me griten! ¿Para eso me llamaste? ¿Para
gritarme? Vengo a ayudarte y ¡qué haces!
Gritar, gritar.....
OFELIA:
!Perdóname! Mira, te he hecho caso. ¡Mira mi vestido!
¿Cómo llevo el pelo?
CONSUELO:
Ponte una pañoleta
OFELIA: No tengo
CONSUELO:
(Saca una de la cartera) ¡Ponte esta! Me voy
OFELIA:
Gracias
CONSUELO:
¡Me gritaste!
OFELIA:
No te vayas
CONSUELO:
No permito que me griten (Va saliendo)
OFELIA:
Consuelito, espera... eres muy linda conmigo
CONSUELO:
Pero me gritaste... Que el señor te perdone. Adiós
OFELIA:
Adiós
(Ofelia
camina por la estancia en penumbra. Suena canto gregoriano)
(Tocan
la puerta)
CHARLOTTE:
¿Qué ha ocurrido aquí? Vamos. ¿Quién se ha muerto?
OFELIA:
Hola, Charlotte
CHARLOTTE:
¡Apuesto a que por aquí ha estado la Consuelo! !Deja huellas como la picadura
de un escorpión! ¡Vamos, hija! La luz
(se enciende la luz) ¡Eso! !Eso! (Saluda
efusivamente) ¡Hola! ¡Ese vecino
tuyo! ¡Si no fuera ciego y no tuviera
tanta panza sería un verdadero pastelillo, eh! No me digas que no lo has
pensado! (Se queda mirando al Sagrado
Corazón) ¡No me digas que te has convertido! (A la imagen) ¡Qué pena, pero tú no debéis estar aquí!
OFELIA:
¿Y qué voy a poner ahí? Ah! !Allí tengo una pintura!
CHARLOTTE:
¡Que pintura ni que pintura! Te traje un regalo... ¡Tarantarara! !Aquí esta!
(Muestra una foto de un fisiculturista) Eso es lo que necesitáis, mujer! ¡Energía!
!Vigor!
(Dando
un beso al cuadro) ¡Papito! (a Ofelia) Ya es hora de que asumas tu condición
como hembrita! !Arróllalos! !Arróllalos! ¿Te vistieron así para un entierro? !No! !No, no! Así no puedes conquistar ni a
los fantasmas de un cementerio. Debemos transformarte ¿Dónde tienes la ropita?
(Ofelia señala) ¡Quítate eso! (Ofelia
obedece y se pone tras un bastidor) Ponte
esto ¡Esto y esto!...!La mujer de hoy debe tomar la iniciativa! Dejarlos
confundidos, boquiabiertos, incapaces de adivinar nuestra próxima jugada.......(Sale
Ofelia) ¿Ves? ¡Impactante! ¡Exuberante! ¡Voluptuosa! !Claro que estáis un poquito flaca! !Pero no
importa! Subimos un poquito aquí apretamos un tantito allá y acá y listo ¡Ya está! ¡Femme fatale! A embrujar
OFELIA: ¿No te parece que estoy un tantito destapada?
CHARLOTTE:
¡No que va! Y si lo estuvieras... ¿qué? Acaso no quieres... arrollarlos? !Imagina
a Cheito, cuando te vea! !Lo dejarás
lelo! !Idiotizado! No se le pasará jamás la idea de
abandonarte...
OFELIA:
¡Ese es el problema!
CHARLOTTE:
Explícate
OFELIA:
Voy a verme esta tarde con el doctor Roncancio
CHARLOTTE:
¿Estas enferma o qué?
OFELIA: El doctor Roncancio fue mi primer enamorado
CHARLOTTE:
¡Cuenta! !Cuenta!
OFELIA: Siento que no he dejado de quererlo
CHARLOTTE:
Pues yo no le veo ningún problema. ¡Avíspate! En España es de moda los
matrimonios expansivos... es decir numerosos.
Que hay de malo que una chica comparta su juventud de la manera más
democrática posible. Piensa... Tu eres el estado, Cheito, representa a la
izquierda... el doctor Roncancio las
fuerzas de la derecha... el vecino cieguito podría ser... ¡Los pobres! !Eso es,
él representa al pueblo! Entonces el estado - Ofelia debe permitir la convivencia pacífica
de todas las fuerzas en aras de una democracia completa.
Y
¿Sabes qué? Aun debes ligarte a un
representante de los independientes, otro de centro, otro.........
OFELIA:
¡Basta! ¿Quién imaginas que soy yo?
CHARLOTTE:
Mi amiga, Ofelia, la más bella de la secundaria
OFELIA:
¡Eres una enferma!
CHARLOTTE:
No vine aquí para ser insultada. ¿Qué te habéis creído?
OFELIA:
¿Qué te has creído tú? Estuviste dos
semanas trabajando en la embajada y ya te crees española. Liberada como las
españolas, malhablada como las españolas...
CHARLOTTE:
No te permito que me ofendas
OFELIA:
¿Y tú si me ofendes a mí?
CHARLOTTE: (Llorando) ¡Yo no te he ofendido! ¡Me llamaste!
OFELIA:
Si te llamé para que me ayudaras
CHARLOTTE:
¿Y no te he ayudado?
OFELIA:
Bueno, sí.....
CHARLOTTE:
¡Ves! Eso es lo que quieres en verdad. Ser osada, atrevida. Una vampiresa. ¡Ven,
sígueme! (Hace como una pantera) Ragggg!
OFELIA: Ragggg!
CHARLOTTE:
Cuando estés cerca del Roncancio ese debes mirarlo de este modo (hace el gesto)
OFELIA:
¿Así? (la imita)
CHARLOTTE:
¡Eso es! Bueno, mi linda, he de dejarte
pues en una hora pasa por la casa
Argemiro mi estilista..... !va a quitarme la horquilla! !Más lindo! Lástima que sea tan raro... !Bueno, me
voy! No olvides..... osada, atrevida....
aggggggggg. ¡Chao!
(Ofelia
se queda sola. Música.......la vemos desfilar con sensualidad ensaya lo
aprendido con su amiga. Tocan la puerta)
(Ofelia
abre, son Pamelia y Lully)
PAMELIA:
¡Hola progenitora! (advirtiendo su indumentaria) ¿Qué es esto? Una casa de
familia o la casa de la comedia.
LULLY:
Señora, luce usted ridícula.
OFELIA:
¿A que han venido?
PAMELIA:
A darte una noticia tremenda
OFELIA:
¿Qué?
LULLY:
¡Venimos a pedirle perdón!
PAMELIA:
De rodillas
LULLY:
Y a rogarle, por lo que más quiera
PAMELIA:
Que me firme el permiso
LULLY:
Para abandonar el país
OFELIA:
¿Qué significa esto?
PAMELIA:
¡Que me voy para siempre¡
LULLY:
¡Nos vamos!
PAMELIA:
!Al exilio!
LULLY:
Como cerebros fugados
OFELIA:
No pueden hacer eso
PAMELIA:
Claro que podemos
LULLY:
O nos firma este permiso o el doctor Cheito va a enterarse de sus acuerdos
secretos con el doctor Roncador
OFELIA:
¡Roncancio!
PAMELIA:
Roncador, Roncancio, Morfeo...Total es lo mismo
OFELIA:
Esta bien, firmaré. !Pamelia, mi amor, piénsalo!
LULLY:
¡Firme! (Ofelia se pone en posición de firmes)
¡Muy graciosa! Firme aquí. Despacio y con buena letra
OFELIA:
!No puedo creerlo! Mi hija, mi sangre, se confabula con fuerzas extrañas para
chantajearme, para humillarme.....
PAMELIA:
La culpa es solo tuya. Si solo pensaras un poco en tu familia en cambio de
hacerle caso todo el tiempo a tus “Fuerzas foráneas”
OFELIA:
Son mis amigas de juventud
LULLY:
En estas circunstancias no hay amigas ¿Verdad amiga?
PAMELIA:
Es cierto camarada ¡vamos, los chicos nos esperan!
OFELIA:
¿Chicos?
LULLY:
La verdad es que son bien grandes
PAMELIA:
Como ese que tienes ahí (señala el afiche) ¡Adiós! (salen)
OFELIA:
!No puede estar ocurriendo! ¿Qué he hecho mal?
¿Qué estoy pagando? (Tocan a la puerta) ¡Voy! ¡Hola, querida!
JOSELYN:
Vine tan pronto como pude “Si una de tus aliadas necesita ayuda debes
inmediatamente asistirla ” y eso hice ¿Cómo van las cosas?
OFELIA:
Mal
JOSELYN:
Pues ahora están bien, yo estoy aquí. Cuéntame
OFELIA:
Para empezar... María Alicia, la empleada, me trata como si fuera un trapo
viejo; Pamelia y su amiguita dejaron la casa y se van del país con unos chicos
como ese (señala el afiche); Cheito cada vez es más cariñoso conmigo, pero el
doctor Roncancio volvió a proponerme romance.
JOSELYN:
Nada grave
OFELIA:
¿Nada grave? !No sé qué hacer! !Se me vino el mundo encima!
JOSELYN:
Para empezar, vamos a quitar esto (quita el afiche)
OFELIA:
¿Qué pongo ahí?
JOSELYN:
No te preocupes. ¡Soy previsiva! Camino a tu casa conseguí la solución. !Aquí
esta! Nada como una imagen que transmita
seguridad, autoridad, pulso firme (pone un afiche de un reconocido político)
OFELIA:
¿Ese?
JOSELYN:
¡Sí ese! En el club todo mundo habla de él. De su elegancia, de su donaire, de
su inteligencia. No vas a negarme que es simpático. Hasta se dice que si tienes
mucha fe puede hacer milagros porque es descendiente en línea directa de
Jesucristo
OFELIA:
¡Yo no creo!
JOSELYN:
¡Pues yo sí! Y si no te gusta, me voy y nunca volveremos a vernos.
OFELIA:
¡No! No te vayas
JOSELYN:
Así está mejor! Míralo... ¡Parece
sonreír! !Pero vamos a lo que vinimos! Esa indumentaria no te sirve ¡Pareces
representante de los estratos bajos! ¡Por no decir otra cosa! Vamos, quítate
esos harapos. (Ofelia se pone tras el bastidor) ¿Cuál es la ocasión?
OFELIA:
Voy a verme con el Doctor Roncancio.
JOSELYN:
¿Doctor en qué?
OFELIA: Es abogado
JOSELYN:
¡Ah, ya! En ese caso tenemos que buscar algo apropiado para la ocasión. ¿A qué
lugar van a ir?
OFELIA: ¡No sé! A un restaurante
JOSELYN:
En ese caso... esto es lo apropiado (le alcanza un vestido) No vayas a permitir
que te lleve a cualquier corrientazo. Debes ponerte en tu lugar. ¡Toda una dama!
OFELIA:
(saliendo) ¿Así?
JOSELYN:
Bueno, ¡más o menos! La clase no se
compra en los supermercados. Se nace con ella ¡A ver, date la vuelta! (Ofelia
obedece) ¡Bien difícil contigo! Se te nota la ordinariez.
OFELIA: !Oye! Me estás ofendiendo
JOSELYN: !La verdad, nena! ¿Qué prefieres? ¿Qué te halaguen, que te mientan, o que te
digan la verdad?
OFELIA: Si, pero no exageres.
JOSELYN:
!No exagero! Pero no te preocupes, para eso estoy aquí. ¡Camina!
OFELIA:
¿Qué?
JOSELYN:
Camina de aquí hasta allá (Ofelia lo hace) ¡Los brazos! Sueltos, armónicos Así
(Joselyn lo hace) Está mejor !Ahora las piernas! !Pasos cortos! Armoniza los
brazos... Levanta el mentón ¡eso es! !El conjunto! Ahora inténtalo con los
zapatos (Ofelia se pone los zapatos) !No, así no! Pareces una boba
OFELIA:
¡Joselyn!
JOSELYN: ¡Bueno, boba no! Te pareces a Ofelia
OFELIA: !Joselyn! No seas cruel
JOSELYN:
!No soy cruel! ¿Por qué crees que te dejó tu hija? Por tu falta de clase En
cuanto el Roncancio ese te vea caminando así te da el plantón. Cheito no, porque
Cheito es igual de tosco...... Así que querida, o me haces caso o te quedas con
el vecino de al lado...¿ah?
OFELIA:
Yo solo tengo una confusión de sentimientos. Para eso te llamé, no para que te
tomes el atrevimiento de cambiarme el carácter.
JOSELYN: "O cambiamos o nos cambian” ¿Habrás oído
eso antes? O atiendes mis sugerencias o te quedarás por siempre con la
mediocridad hasta el cuello
OFELIA:
¡Yo no soy mediocre!
JOSELYN:
Puede que no ¡Pero te comportas como si lo fueras! Así que... ánimo, otra
vuelta... !Energía, proyección, pasos cortos! Mentón en alta. !Otra vez!
OFELIA:
¡No puedo más!
JOSELYN:
¿Ves? “No puedo más es una expresión
mediocre” Querida, me estás haciendo
perder el tiempo. ¡Me voy! Me esperan en la asociación de Damas Vinotinto. !Si vuelves a necesitarme no dudes en no
llamarme! ¡Me exasperas! Adiós, figurín (se va)
OFELIA: !Espera, necesito dinero
JOSELYN: Pídeselo al Doctor Roncancio
OFELIA: ¿Qué hacer? (Música: Ofelia intenta la
compostura sugerida por sus tres amigas. Termina atolondrada, desesperanzada.
De repente se le ocurre algo. Va al teléfono) Alo! Dr. Roncancio! !Me temo que
no voy a ir a su cita! ¡Yo no soy tu amor!
!Digo... yo no soy su amor! !Acabo
de descubrir que amo profundamente a Cheito! ¡Sí! !Voy a recuperar lo que tenía!
No me vuelva a llamar (Marca otra vez) ¡Contesta, Cheito! (Nadie le contesta,
baja la luz, se oyen voces: son textos en off de todas sus amigas, de su hija, de
su criada. Tocan la puerta. Ofelia abre)
M.
ALICIA: ¿Qué ha pasado aquí?
OFELIA:
!Nada que le interese! Póngase inmediatamente a limpiar esta casa, para eso se
le paga
M.
ALICIA: ¡Mil perdones, señora! !No voy a limpiar ninguna casa! He venido para
que usted me pague lo que me debe. Debo viajar a Medellín.
OFELIA:
¿A Medellín?
M.
ALICIA: !Si, voy a Medellín! El Dr.
Cheito se ha dado cuenta de todo y ha decidido abandonarla. No va a volver. Él y yo vamos a casarnos
OFELIA:
¡No puede ser!
M.
ALICIA: !Lo es! Así que no tenemos más que decirnos (Le coge la cartera) ¿No
tienes efectivo?
OFELIA:
¡Ladrona!
M.
ALICIA: ¡En ese caso! !Sacaré de aquí! Don Cheito le mandó este dinero que le
debía y yo tomaré una tercera parte. !Tome lo demás!
OFELIA:
No quiero el dinero de ese traidor. ¡Lárguese!
M.
ALICIA: !Soy una mujer honrada! Aquí se lo dejo. Adiós. A propósito (señala el afiche) ¡Qué guapo es!
Dicen que hace milagros
OFELIA:
!Lárguese! (M. Alicia se va) (Ofelia se sienta en un rincón. Música. Llora. Al
finalizar entran Pamelia y Lully)
PAMELIA:
Vamos, levántate sólo quería darte una lección ¿Verdad Lully?
LULLY:
!Verdad, Pam!
PAMELIA:
Cuando se vive como tú la haces atendiendo consejos de los demás; pretendiendo
que los otros van a solucionar nuestros problemas, se termina así, indefensa,
llorosa, apabullada.
OFELIA:
¿Qué debo hacer?
PAMELIA:
Empezar de nuevo. Reconstruirte
LULLY:
Si le sirve de consuelo, señora,
Colombia nuestra patria vive una situación igual. Y es su deber la reconstrucción.
Y ahí estamos nosotros, para hacerlo. Así que ¡vamos! Adelante
OFELIA:
¡Es verdad! Pero antes, debo hacer una llamada (Música de las fonoadictas.
Composición escénica para saludo final)
FIN
No hay comentarios:
Publicar un comentario