Ebrios o la traición del río en "Piezas cortas para entrenar actores" de Fermín Hood

 

EBRIOS O LA TRAICION DEL RIO

Drama en un acto

 

 

PERSONAJES:

 

ANGELICA, joven y hermosa tendera de pueblo

FERNANDO, apuesto borrachín, tumbalocas de pueblo....Con fuertes aspiraciones políticas

ROCIO, temperamental madre de Fernando, antaño la niña bonita

GLORIA, horrible retoño de Rocío

 

(Una cantina de pueblo. La puerta se abre con violencia. Entra Fernando tambaleándose y escupiendo espuma por la boca. Con mucha dificultad logra sentarse frente a una mesa y poner el rostro entre sus manos. Gime)

FERNANDO: ¡Negra! Tráigame un trago….!Negra inmunda! ¿Es que no oye? Quiero que me traiga un trago. Un trago bien fuerte para calmar esta honda pena que me despedaza el alma. ¿qué pasa negra? ¿Dónde está el trago?

ANGELICA: (Con preocupada coquetería) ¡Aquí lo tienes! (Tierna) ¿Qué te pasa?

FERNANDO: ¡Qué te importa….bruja chismosa!

ANGELICA: Me importa más de lo que te imaginas….!Vamos, cuéntame!

FERNANDO: ¡Déjame aquí la botella! Hoy quiero emborracharme hasta reventar. Tengo el corazón deshecho. La vida ya no me importa. Esa ingrata, esa ingrata…¿hacerme eso a mí?

ANGELICA: ¡No te hagas daño! Es que…es que no te has dado cuenta de lo mucho que significas…para el pueblo, para tu familia, para mí…..Si, para mí. ¡Lo dije!

FERNANDO: ¡Basura! Todas las viejas son la misma cosa…¿Hacerme eso a mí? Yo que tanto lloré por tus besos, yo que siempre la ame sin medida…y en pago a tanta devoción, la miserable se deja sorprender entre los brazos de otro hombre….Yo, los sorprendí…Y no se le dio nada…!Nada!

ANGELICA: No pienses más en eso…!Mira! Mujeres hay muchas. Mujeres que te quieren de verdad, Por lo que eres. No te has fijado que yo….

FERNANDO: ¡Lárgate! ¡Déjame en paz! Quiero estar solo….

ANGELICA: Pero mi amor….

FERNANDO: ¡Lárgate! (La empuja con mucha violencia. La muchacha cae al piso y es inevitable el llanto) ¡No puedo más! No se si podré soportar esta pena…(Bebe un sorbo abundante) ¡Negra! Tráigame una garrafa de aguardiente. ¡Ya! (A regañadientes la muchacha le obedece) ¿Qué va a ser de mí? Solo, solito…como un perro callejero, como barca sin barquero…solo con mi soledad….!Ayyy, Luisa! ¿Por qué te quiero tanto? (Aparece en la puerta, tímida a más no poder, Gloria)

GLORIA: ¡Hermanito! ¡Hermanito! Vámonos para la casa. Ya no tomes más….Mira que eso te hace daño….

FERNANDO: ¡Silencio! Silencio en la noche, ya todo está en calma….!Ayyyy, Luisa! ¿Por qué me has abandonado?

GLORIA: ¡Hermanito! (Lo coge por el brazo) Ya no piense más en esa mujer. Vámonos mejor para la casa. Mi mamá está enfadada

FERNANDO: ¡Sufro! Sufro mucho, hermanita. Esta traición ha dejado en mi alma una honda pena…ven. ¡Ven a llorar conmigo! (La abraza)

GLORIA: Hermanito, me duele mucho verlo así, pero yo no tengo ganas de llorar

FERNANDO: ¡Llore mugrosa! Le digo que llore

GLORIA: Pero hermanito….

FERNANDO: Después de lo que voy a decirle no va a llorar…..!va a berriar como nunca lo había hecho!

GLORIA: ¿Qué?

FERNANDO: ¿Sabes con quién estaba Luisa, mi adorada enamorada en el río? ¿Dándose besos? ¿Fornicando?

GLORIA: ¿Con quién?

FERNANDO: Con tu adorado Orlando…..

GLORIA: ¡Mentira! Orlando no es capaz de…..él no puede….

FERNANDO: Si es capaz, si puede el malparido y para colmos….se rieron en mi cara…..Los vi con estos ojos, los oí con estos oídos…..

GLORIA: ¡Qué desgraciada soy! (Arranca a llorar)

FERNANDO: Lo ves hermanita. Somos una pareja de desdichados. Llore, llore hermanita….desahóguese como lo hago yo…Eso es…Venga. Tómese un trago..

GLORIA: ¡Gracias! Sírvame otro, hermanito….es la única manera de soportar tanta tristeza…

FERNANDO: ¡Toma! ¡Toma! Mi derrota la tengo sepultada, tengo el pelo completamente blanco….

GLORIA:  …..pero voy a sacar juventud de mi pasado. Y te voy a enseñar a querer, porque tú lo has querido (Y así apuran un trago tras otro hasta llegar a un estado de euforia. De pronto aparece en la puerta de la cantina Rocío)

ROCIO: ¡Muy bonito! Este par de sinvergüenzas….enlodando el poco prestigio que le queda al apellido de nuestra familia. Me saqué el premio gordo con estos dos vagabundos. No solo se emborrachan hasta perder el sentido, sino que lo hacen en un lugar como este…de mala muerte…un antro de perdición…..!Jesucristo! ¿Qué mal me estás haciendo pagar?  Miren a este pendejo….ya con los años que tiene y llorando a moco tendido por una bandida que hace años se le veían las intenciones….haciéndola quedar a una como una estúpida…y la otra, la otra…le encargo que se lleve al paparote para la casa y se queda con él, tomando trago como un mecánico…en un sitio como estos, nada recomendable para la reputación de una dama….Las mujeres de la familia se deben estar revolcando de asco en sus tumbas….Nunca había imaginado que me fuera a pasar una cosa tan horrible como esta…

FERNANDO: Mamita…!tranquilícese!...Más bien tómese un traguito con nosotros

ROCIO: ¡Descarado! ¡Cínico! ¡Mal hijo! ¿Cómo te atreves…?

GLORIA: ¡Pero mamita!

ROCIO: No me digas mamita. Me avergüenzo de ti..

FERMANDO: ¿De mí también, cierto? Pues bien…está bien…pero escucha muy bien lo que tengo que decirte: Yo estoy sufriendo por la traición de Luisa….mi hermanita me está acompañando en la pena…y lo que es más…el Orlando..el miserable ese que tú escogiste para mi hermana era el que le hacía cositas a Luisa en el rio…Si, madre. El novio de tu hija la engaña con la novia de tu hijo…Ah…y eso no es nada…..el santo varón con el que te casaste, pues no es tan santo como lo imaginábamos,…

ROCIO: ¿Qué quieres decir?

FERNANDO: Nuestro padre, tu esposo…nos engaña

ROCIO: ¡No puede ser! ¡Calla la boca!

FERNANDO: ¡Es verdad! Y no es con cualquiera…es con Susana, tu mejor amiga…Se burlan de ti…Se burlan de todos nosotros

ROCIO: Me va a dar algo

GLORIA: ¡Mamita!

FERNANDO: Toma un traguito. Te hará bien

ROCIO: ¡Gracias…mijo!

FERNANDO: ¿Ahora si entiendes lo que se siente?

ROCIO: ¡Si, mijo! Dame otro…(Y otro, y otro….) ¿Sabe una cosa mijo? Yo creo que lo mejor es que los tres nos larguemos de este pueblo..

GLORIA: Yo te apoyo. Estamos desbaratados emocionalmente

FERNANDO: Y tú que te creías el rey de todo el mundo, y tú que nunca fuiste capaz de perdonar…

ROCIO: Pero hoy tu mala suerte la espalda te ha volteado

GLORIA: ¡Maldito corazón! Me alegro que ahora sufras…

ROCIO: Vámonos para la casa. Allá tengo escondida una botellita de anisado…

FERNANDO: ¡Vámonos, donde nadie nos juzgue….!

TODOS: Maldito corazón. Me alegro que ahora sufras…La vida es la ruleta en la que apostamos todos y a ti te había tocado….(Salen los tres abrazados, cantando. Angélica sale despacio tras ellos. Con mucha tristeza los ve alejarse…pasea la mirada por el entorno hasta detenerla en la garrafa casi vacía. Súbitamente coge el recipiente y bebe un prolongado trago…Se sienta dispuesta a terminar la botella y entre sollozos se le escucha claramente…”Fernando, Fernando”

 

FIN