viernes, 18 de abril de 2025

Carta de un gato a su dueña - Texto de Fernando Arias Alvarez

 


ARRULLO (Palabras de gato)

 

Parecerá raro, pero me atrevo a escribir estas palabras aun intuyendo que no soy la mascota de tus preferencias.  Me anima eso si un sentimiento de  gratitud por que tú, sin que nadie te lo dijera, me recogiste  de un basurero, me diste de comer y me trajiste a vivir a tu casa.

No tenía nombre.

Ahora que compartimos el mismo espacio sentiste la necesidad de ponerme uno como es usual en todo entorno familiar. Pensaste al instante en ponerme Beppo como el celebrado felino del gran argentino y en  otros nombres que tu curiosidad literaria maneja a la perfección.

Al final has decidido bautizarme como Arrullo, un nombre muy delicado para mi gusto, pero basta que signifique para ti. Me gusta.  Siempre que escuche tu voz diciendo: “Arrullo”, ahí estaré para ti.

He dejado  de ser un gato anónimo, un gato más para convertirme en tu Arrullo. Pronto me irás conociendo, pero voy a adelantarte algunos de mis rasgos principales que son producto de un diligente autoanálisis felino:

-         Me diferencio de los otros gatos porque no gusto de perseguir, acorralar y asesinar ratones pues detesto al máximo la más mínima manifestación de violencia. (Un viejo gato sabio me apodaba Martin Luther y estoy seguro que esa referencia no te es extraña. Me gustaba llamarme así, pero ahora me gusta más arrullo, porque soy tuyo. Soy el gato más pacífico del mundo y quiero que sientas orgullo de mi paz. Yo me siento orgulloso de tu amor libertario

-         Te advierto que me gusta dormir bastante en  las tardes

-         Por la noche rondaré por los pasillos de nuestra casa para velar tu descanso y de repente coincidir con uno de tus sueños, ojalá uno hermoso.

-         Voy a juguetear con los bordes de tu falda cuidando eso si no rasgarla para no causarte disgusto

-         Buscaré lecho en la suavidad de tus brazos

-         Jugaré con  los niños cuando haya niños

-         Se muy bien que creceré y no seré más un pedacito de gato, pero te prometo que nunca dejare de alegrar tu vida

-         Se que no me llamarán guardián  como a otras mascotas más ponderadas, pero seré un  testigo mudo de tus alegrías y de tus penas

-         No podré hablarte, pero si lo necesitas, si me insinúas una cabriola saltaré no más que por verte sonreír y mostrarte mi afecto.

-         Nuestros mundos no son  iguales, pero se complementan   y eso nos permite disfrutar de momentos únicos. Juntos en las buenas y en  las malas. Eso no lo consigues con los seres humanos

Ya me conoces. Soy tu arrullo.

Verás que no soy un animal mentiroso como ese que tienes fotografiado en tu computadora.

No hay comentarios:

Publicar un comentario